jueves, 11 de julio de 2013

Documental "La Zamora Sefardi"


Jesús Jambrina. Desde finales del siglo XIV y durante todo el XV hasta el desafortunado decreto de expulsión firmado por los reyes católicos Fernando e Isabel en 1492, la ciudad de Zamora, en el occidente español, tuvo una de las aljamas hebreas más potentes de la península ibérica o Sefarad como los judíos llamaron a la España medieval. A través de entrevistas, imágenes y música, este documental resume las referencias histórica sobre este hecho casi desconocido hasta hoy, evidenciando que la ciudad del Duero cuenta con una tradición judía en toda la línea: sinagogas, escuela Talmud Torá, cementerio y un alto número de figuras intelectuales encabaezadas por el rabino Isaac Campantón (1360-1463), Gaon de Castilla.

martes, 9 de julio de 2013

Compromiso institucional para mantener vivo el legado de la cultura hebrea

El Ayuntamiento señalizará las dos juderías de la ciudad y estudiará actividades de divulgación de la Zamora Sefardí La tercera y última jornada del congreso "Reencuentro e Historia de la Aljama de Zamora" ahondó en la presencia de la cultura hebrea en la provincia, a la vez obtuvo el respaldo institucional del Ayuntamiento, al comprometerse la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, a señalizar las juderías de la ciudad y crear una mesa de diálogo para futuras actividades conjuntas. 

Además, la Diputación Provincial editará las ponencias y las actas del congreso, que se ha desarrollado en el NH Palacio del Duero y que ha reunido en Zamora a destacados expertos internacionales en el legado sefardí. Por la mañana, en el salón de actos de La Alhóndiga tuvo lugar la presentación del documental "Zamora Sefardí", que será emitido también en este periódico. 

A continuación la alcaldesa de Zamora tuvo un breve encuentro con los presentes, que solicitaron la señalización de las juderías de la ciudad y los restos de la cultura hebrea. En este sentido, la primera edil señaló que el Ayuntamiento está dispuesto a mantener distintos encuentros con la organización del congreso, a fin de que la ciudad pueda acoger distintas actividades para mantener vivo y difundir el legado sefardí. Además de este compromiso del Ayuntamiento, el diputado de Cultura, José Luis Bermúdez, adelantó en la jornada inaugural que la Diputación editaría las ponencias y conclusiones del congreso, que ha abarrotado en todas sus jornadas el salón de actos del Hotel NH. 
Tras un paseo por la judería nueva (sita en el Barrio de la Lana), que se inició en la plaza de San Sebastián, los congresistas se trasladaron el NH Palacio del Duero, donde tuvo lugar la cuarta de las mesas del congreso, bajo el epígrafe "Judaísmo en El Quijote e identidad conversa". Moderada por Leandro Rodríguez, la mesa contó con la intervención de Abrahan Haim, presidente del Consejo de la Comunidad Sefardí de Jerusalem, quien expuso el reflejo de la fiesta de Las Cabañas (Sukot) celebrada junto a Benavente en El Quijote. Elizabeth Koza por su parte ahondó en los problemas de identidad de los conversos judíos en la Edad Media, en una sociedad que nunca llegó a equiparar a los cristianos viejos con los cristianos nuevos y en la que los propios conversos se enfrentaban a un dilema interno entre sus creencias judías y sus prácticas cristianas. 

Cerró la mesa el escritor Santiago Trancón, que hizo un exhaustivo repaso por las huellas judías presentes en El Quijote y que defendió además el origen leonés-sanabrés de Miguel de Cervantes y su condición de judío converso. La Cábala y la educación judía en Castilla centraron la última de las mesas redondas, con la presencia de Mario Saban, presidente de Tarbut Sefarad, Leandro Rodríguez, que se refirió a la traducción de la Biblia de Alba realizada por el rabino Mosé Arragel; y Virginia Labrador, que expuso la importancia de la educación judía en Castilla en el siglo XV. 

Tras las conclusiones, un concierto de la gran dama de la canción sefardí, Judtih Cohen, puso punto final al congreso, con un recorrido por la tradición musical de diversas partes del mundo y de la Península Ibérica donde está presente el legado sefardí. 

El presidente del ciclo, Jesús Jambrina, en unas primeras valoraciones, destacó la importante presencia de congresistas, así como el compromiso institucional de mantener viva la llama de la cultura hebrea en la ciudad. Así, varios congresistas apuntaron a la idea de crear un centro de estudios permanente o de organizar un congreso de tipo bianual, además de dedicar una calle o plaza a uno de los pensadores y religiosos judíos más importantes de la España medieval.

Posteriormente, un grupo de 26 congresistas -judíos y no judíos- participaron en una cena de Sabhatt, ofrecida en el NH Palacio del Duero, en la que compartieron mesa, mantel y cánticos, con un menú compuesto por arroz con verduras, bacalao con patatas y macedonia de frutas, para recibir el día más sagrado según el rito judío. La cena comenzó con el encendido de las velas a cargo de las mujeres judías, así como con el rezo de diversos salmos y la bendición del pan y del vino, que fue repartido entre todos los comensales. La velada sirvió también para el intercambio de experiencias y para despertar, en torno a una mesa, la memoria dormida de la Zamora judía. El sueño de Sefarad.